Seljavallalaug (Seliavatlaloig) es una piscina al aire libre ubicada en el sur de Islandia. La piscina es una de las más antiguas de Islandia ya que fue construida en 1923 por algunos visionarios que querían ofrecer a los lugareños un lugar donde pudieran aprender a nadar.
Seljavallalaug está situada no muy lejos de Seljavellir. La construcción fue dirigida por Bjorn Andrésson Berjaneskoti, que recibió el “Ungmennafélagið Eyfelling” para realizar dicho trabajo. Varios cursos en la piscina se establecieron como parte de la enseñanza obligatoria en 1927. La piscina es de 25 metros de largo y 10 metros de ancho fue la piscina más grande de Islandia hasta 1936.
Seljavallalaug es uno de esos lugares que escapa a muchos viajeros en Islandia porque a priori no están en su lista de “lo que hay que ver”. Personalmente creo que es un punto digno de visita por su pintoresca belleza y por su puesto, porque dar se un baño en sus aguas te dejará listo pare seguir tu jornada descubriendo el sur de Islandia.
La piscina está enclavada en un valle estrecho por debajo del Eyjafjallajökull (el famoso volcán que explotó en 2010) y es la piscina más antigua de Islandia que aún se conserva .
A diferencia de hoy, donde los islandeses no se gradúan de la escuela sin pasar una prueba de natación obligatoria, la mayoría de los islandeses al comienzo de la década de 1900 no sabían nadar y esto era un problema teniendo en cuenta que muchos de ellos vivían de la pesca. Era importante conseguir este objetivo y los que la construyeron lo sabían.
Hoy en día la piscina se mantiene mayormente por voluntarios y gracias a donaciones, y es por esto que tú puedes todavía nadar en ella mientras disfrutas del espectacular entorno.
Seljavallalaug está construida al lado de una pared de roca que conforma una de sus cuatro paredes y el agua proviene de un manantial natural de agua caliente cercano. Tiene un tamaño aceptable y nos ofrece hasta vestuarios en los que no hay duchas.
De momento no hay que pagar entrada pero por favor, muestra cuidado y respeto no sólo para que otros la puedan disfrutar sino por la historia de esta especial piscina que durante un siglo ha sido testigo de innumerables relatos, retos, y hasta estragos cuando después de la erupción de Eyjafjallajökull la piscina quedó totalmente cubierta de ceniza.
El consumo de alcohol está terminantemente prohibido en esta piscina.
¿Cómo llegar a Seljavallalaug?
Cuando estás conduciendo dirección de Reikiavik-Vik-Reikiavik por la carretera de circunvalación (Nº1) toma el cruce de la carretera 242 marcada como “Raufarfell”. Es un poco más allá de Þorvaldseyri (una conocida exposición sobre volcanes en islandia), así que asegúrate de no perderte como hicimos nosotros la primera vez que fuimos hace ya unos cuantos años. Conduce hasta ver un letrero que dice Seljavellir y sigue ese camino hasta el final del valle donde ya no puedes continuar más hasta que llegas a un aparcamiento desde donde tienes que caminar para encontrarla. Desde aquí caminando 15-20 minutos llegarás a la piscina.
No la podrás ver hasta que no estés encima de ella así que si crees que vas por el camino equivocado ¡sigue hasta el fondo del valle que la encontrarás! Tendrás que saltar por encima de un pequeño arroyo y el camino es a veces un poco irregular , pero es un paseo fácil y todo el mundo debería ser capaz de hacerlo.
Cuando estés allí, simplemente disfruta en silencio y de lo reconfortante que es darse un baño de agua caliente en plena naturaleza salvaje islandesa. Y para los más intrépidos y atrevidos aventureros el reto de salir de la piscina y sumergirse por 3 segundos en las frías aguas del río que está justo al lado seguro que pondrá el punto divertido a esa jornada.
Adrián & Berglind Rós
IslandiaAttractions.blogspot.com, Marzo del 2015